Sólo por hoy

papa-juan-xxiiiLas palabras que vas a leer ahora las escribió el Papa Beato Juan XXIII. Creo que más que palabras son reglas de vida. Te las regalo. Me gustaría que las imprimas, las pegues donde las veas y las leas TODOS LOS DÍAS antes de salir de tu casa. A mi me las regaló Santi, mi hermano más grande. Y aprovecho para hablar un segundo de él. Hace tiempo que logramos una conexión que nunca habíamos tenido, una linda sintonía. Él es el más grande, yo el más chico, demasiado parecidos en muchos aspectos de nuestras personalidades nos llevaron, lamentablemente, a parecer autitos chocadores durante un largo trecho de la vida. Hoy, yo más grande, él más maduro, más humano, más ejemplo (por lo menos para mí), nos encontramos hablando el mismo idioma, hablando del mismo tema, hablando de esto:

Sólo por hoy:

1. Sólo por hoy trataré de vivir exclusivamente el día, sin querer resolver el problema de mi vida todo de una vez.

2. Sólo por hoy tendré el máximo cuidado de mi aspecto: cortés en mis maneras, no criticaré a nadie y no pretenderé mejorar o disciplinar a nadie, sino a mi mismo.

3. Sólo por hoy seré feliz en la certeza de que he sido creado para la felicidad, no sólo en el otro mundo, sino en este también.

4. Sólo por hoy me adaptaré a las circunstancias, sin pretender que las circunstancias se adapten todas a mis deseos.

5. Sólo por hoy dedicaré diez minutos de mi tiempo a una buena lectura; recordando que, como el alimento es necesario para la vida del cuerpo, así la buena lectura es necesaria para la vida del alma.

6. Sólo por hoy haré una buena acción y no lo diré a nadie.

7. Sólo por hoy haré por lo menos una cosa que no deseo hacer; y si me sintiera ofendido en mis sentimientos procuraré que nadie se entere.

8. Sólo por hoy me haré un programa detallado. Quizá no lo cumpliré cabalmente, pero lo redactaré. Y me guardaré de dos calamidades: la prisa y la indecisión.

9. Sólo por hoy creeré firmemente -aunque las circunstancias demuestren lo contrario- que la buena providencia de Dios se ocupa de mí como si nadie existiera en el mundo.

10. Sólo por hoy no tendré temores. De manera particular no tendré miedo de gozar de lo que es bello y de creer en la bondad.

Difícil pensar que lo tenemos que hacer toda la vida, difícil mirar para adelante y creer que debemos seguir a rajatabla estas 10 reglas… ¿Esto tengo que hacer durante toda mi vida? No, no lo pensemos así, porque vamos a caer mucho mas rápido de lo que imaginamos. Mejor concentremosnos en hacerlo sólo por hoy. De a poco vamos a ir sumando días y días y quizás lo terminemos haciendo durante toda nuestra vida.

Antes de terminar la nota quiero dejarte estas dos frases tan humanas y aplicables a TODOS NUESTROS DÍAS… La primera habla del día rutinario y de la cantidad de cosas que dejamos para más adelante, y la segunda, la segunda es increíble… Sólo depende de nosotros:

¿Hay que hacer una cosa? Entonces, ¿por qué retrasarla? ¿a qué viene la pereza? Cuanto antes se acabe, mejor. ¡Decisión!

Puedo hacer el bien durante doce horas. Lo que me descorazonaría es si pensase que lo tengo que hacer durante toda mi vida.

Juan XXIII